Manuel Guzmán López
Hablando de Venezolanos Buenos… DeliChicha en Madrid!

Desde que cerró el año, quedé con la molestia de eso que las noticias que se publican en los periódicos o esparcen en las redes sociales, sean sobre los pocos venezolanos en el mundo, que optaron por el mal, cuando en realidad, los venezolanos buenos, somos definitivamente mayoría.
Es por eso, que optamos, desde estas líneas y este periódico de venezolanos buenos, en hacernos eco de los logros que tantos Venezolanos buenos están logrando en el mundo, y que lamentablemente, en nuestra propia tierra no pueden.
Hablando de Venezolanos Buenos, quiero comenzar con esta parejita de muy jóvenes amigos venezolanos, estudiantes universitarios y como dije en su momento, sin ninguna necesidad económica por trabajar, que se han hecho llamar como resultado de su esfuerzo y la calidad de su maravilloso producto, “Los Reyes de la Chica” en Madrid.
Ignacio Di Napoli y su socia Maria Swidorowichs, siguiendo la exitosa receta de otro joven Venezolano Bueno, Ricardo Escorihuela a quien podríamos por igual llamar “El Rey de la Chicha de Miami” donde se ha hecho muy famosa por ser la chicha del restaurante Bocas Grill… de otros Venezolanos Buenos, decidieron incursionar en este negocio y crearon la marca DeliChicha (que por cierto, todo el diseño de imagen fue creado por otro Venezolano Bueno, El muy talentoso Modesto “Poncho” Alfonzo) y hoy por hoy se distribuye en cerca de 20 restaurantes de Madrid y ya tienen pedidos para vender en otras ciudades de España, inclusive, fuera de la Península Ibérica.
Desde su pequeño laboratorio, elaboran con la mística y el secreto que Ricardo les confió, la rica y cremosa chicha de arroz, que al probar, me llevo de inmediato al chichero en el Elevado de Los Ruices, donde con mucha frecuencia, iba caminando cuando muchacho, solo por disfrutar de esta maravilla tan venezolana.
Están tan claros en el trabajo que hacen y en respetar los patrones que les fueron dados, que cuando les preguntamos sobre los ingredientes y, a pesar de la confianza que nos tenemos, me respondieron que la clave estaba en la cebolla.
Supe entonces que debería conformarme con probar y disfrutar.
La chicha es una bebida muy típica de Latinoamérica, donde por lo normal, es una bebida alcohólica que se prepara a base de maíz fermentado, pero en Venezuela, no es una bebida alcohólica, ya que se prepara a base de arroz, azúcar y vainilla, obteniendo un producto dulce y muy cremoso que se consigue con facilidad en carritos que a lo largo de parques o en las calles de cualquier ciudad, la venden, agregando según tu gusto, leche condensada y/o canela.
Por lo general, es hecha de manera artesanal por los propios vendedores, aunque se consigue también industrial… que obviamente no es lo mismo.
Tuve la oportunidad de probar la chica en su laboratorio, así como también en unos de los establecimientos donde la distribuyen y fue para nuestra sorpresa, que además de agotarse muy rápidamente, la mayoría de los comensales, eran españoles que nunca antes la habían probado y, estaban encantados… aunque vamos a estar claros, como no lo van a estar, cuando no solo el producto es maravilloso, sino la atención de este par de jóvenes embajadores de nuestro país, con ese “no sé qué” tan nuestro, llevan el producto a otro nivel.
En España, así como en Miami, estos chicos se han convertido en embajadores gastronómicos y culturales de nuestro país, así como digno ejemplo que los Venezolanos Buenos somos mayoría.
Recuerden, vivan la experiencia en positivo, disfruten de los resultados y sean ejemplo de Venezolanos Buenos, Embajadores de nuestro país!